El registro no solo protege tu nombre comercial, sino también otros elementos distintivos como sonidos o formas tridimensionales o símbolos y elementos gráficos, otorgándote exclusividad y distinción en el mercado.
Registrar tu marca te brinda protección legal y derechos exclusivos para usar la marca, así como el derecho a oponerse que un tercero registra una marca idéntica o similar que provoca riesgo de confusión.
Por ese motivo, es esencial para ser diferenciado en el mercado y facilita trámites burocráticos. Además, puede generar ingresos a largo plazo y fortalecer tu posición ante entidades financieras. En un mercado competitivo, tener una marca registrada es una inversión indispensable para destacar y prosperar
¿Cuáles son las consecuencias de no registrar tu marca?
No registrar tu marca puede acarrear consecuencias graves, desde el riesgo de que terceros se apropien de tu identidad empresarial hasta la pérdida de inversión en publicidad. Incluso podrías enfrentarte a la prohibición de utilizar tu propia marca si alguien más la registra legalmente antes que tú.
¿Cuáles son las Ventajas de registrar tu marca?
Registrar tu marca te brinda protección legal, diferenciación en el mercado y facilita trámites burocráticos. Además, puede generar ingresos a largo plazo y fortalecer tu posición ante entidades financieras. En un mercado competitivo, tener una marca registrada es una inversión indispensable para destacar y prosperar.
¿Cuál es el proceso de registrar tu marca?
Desde la elección del nombre de la marca hasta la solicitud de registro, te guiaremos a través de cada fase del proceso. Es crucial seleccionar cuidadosamente la tipología de productos o servicios que deseas proteger, así como verificar la disponibilidad del nombre elegido antes de proceder con la solicitud oficial.
Es crucial seleccionar cuidadosamente la tipología de productos o servicios que deseas proteger, así como verificar la disponibilidad del nombre elegido antes de proceder con la solicitud oficial. Para ello, ofrecemos una investigación previa para detectar denominaciones idénticas o semejantes que puedan obstaculizar el registro.
Una vez registrada tu marca, esa contará con una vigencia legal de 10 años, la cual puede renovarse una vez transcurrido ese período para que la marca se mantenga en vigor. A lo largo de todo el período de vigencia de la marca, contarás con un servicio de mantenimiento y representación del expediente, así como de vigilancia para protegerla frente a posibles infracciones.
Si aún tienes dudas o necesitas ayuda con el proceso de registro, nuestro equipo de abogados expertos en propiedad intelectual está aquí para ayudarte, contáctanos.